lunes, 31 de octubre de 2016

Mudéjar de la provincia de Zaragoza patrimonio de la humanidad

Colegiata Santa María de Calatayud
Tras nuestras entradas previas sobre el mudéjar turolense y el mudéjar de la ciudad de Zaragoza, le toca ahora el turno a la provincia zaragozana. Esta provincia atesora un rico conjunto de cerca de 80 monumentos encuadrables en el estilo mudéjar aragonés


Y dentro de este importante conjunto, se han singularizado tres monumentos como mejores exponentes del mudéjar aragonés junto a los otros ya conocidos de Teruel y de la ciudad de Zaragoza. Nos referimos a la Colegiata de Santa María de Calatayud; a la Iglesia de Santa María de Tobed y a la Iglesia de Santa Tecla de Cervera de la Cañada.

Cervera de la Cañada, con 300 habitantes, dista 100 kilómetros de Zaragoza. Tobed, por su parte, tiene una población de 250 habitantes y se encuentra a 80 kilómetros de la capital. Calatayud es un importante municipio de 20.000 habitantes, a 90 kilómetros de Zaragoza. Con esto, queremos resaltar la importancia para Cervera y Tobed de contar con un monumento "patrimonio de la humanidad".

En mi visita al mudéjar aragonés no pude desplazarme a estas localidades, así que las fotografías están tomadas de la web de patrimonio cultural de Aragón.

Siguiendo esta web, La Colegiata de la Asunción de la Virgen de Calatayud, conocida como Santa María la Mayor, combina en su construcción actual elementos mudéjares, renacentistas y barrocos, resultado de su dilatada historia que se remonta a los años de la Reconquista de la ciudad por Alfonso I. Por su claustro mudéjar y su torre de planta octogonal es considerada una de las obras arquitectónicas más importantes del arte mudéjar aragonés, declarado por la UNESCO Patrimonio Mundial.













Su torre se caracteriza por ser una de las más altas mudéjares aragonesas con casi 72 metros de altura. Sigue la tipología de torre alminar de influencia almohade. Así tiene un cuerpo central y en el espacio entre la torre interior y la exterior, discurren escaleras de ladrillo cubiertas con bóvedas de aproximación de hiladas. En el exterior se decora con paños de ladrillo resaltado, vanos apuntados y contrafuertes con pilastras adosadas en los ángulos del octógono.

El ábside constituye otro de los vestigios de la fábrica mudéjar, realizado enteramente en ladrillo. Presenta planta poligonal, carente de contrafuertes, decorando exteriormente los paños mediante una arquería apuntada en la parte inferior y otra de medio punto en la superior.


La Colegiata de Santa María en Calatayud fue declarada Bien de Interés Cultural por Real Decreto del Ministerio de Fomento de 14 de junio de 1884, publicado en la Gaceta de Madrid de 29 de julio de 1884. 

Por su parte, la iglesia de la Virgen deTobed es uno de los mejores ejemplos de iglesia-fortaleza del mudéjar aragonés, junto a San Félix de Torralba de Ribota, por lo que forma parte del conjunto monumental mudéjar declarado Patrimonio Mundial por la UNESCO en 2001. Este tipo de iglesias es fruto de la influencia de las órdenes militares en la región, en concreto de la Orden del Santo Sepulcro cuya casa matriz en el Reino de Aragón se situaba en Calatayud. La construcción se lleva a cabo en dos etapas: la primera en 1356 y la segunda hacia 1400.

Es una iglesia de nave única con capillas laterales y cubierta con  bóveda de cañón apuntado. La cabecera es recta, abierta por tres capillas. En el interior posee una espléndida ornamentación mudéjar y se atribuye al arquitecto del Papa Benedicto XIII, Mahoma Rami, que posiblemente dirigiera las obras de construcción.
Es una decoración especialmente rica en pinturas, yeserías que fueron fruto del mecenazgo de la Orden del Santo Sepulcro, que en este lugar tenía una encomienda, y del papa Benedicto XIII. Se conservan algunos graffiti de la época de gran interés. La decoración de toda la superficie de los muros y bóvedas es pintada. El grueso ornamental se concentra en el presbiterio a base de motivos geométricos islámicos. Los ventanales se decoran con yeserías. Las de la nave son celosías de decoración vegetal estilizada y compleja, llamada ataurique. El último tramo de la nave probablemente fue el decorado por Mahoma Rami con celosías puramente góticas.
















La techumbre o alfarje, de madera, está también ricamente decorada. La capilla de la Virgen es de gran interés artístico. Se decora con azulejos de Muel del siglo XVI  de colores azul, verde y amarillo.

El altar mayor es de madera y estilo barroco. En la parte central de este retablo se encuentra un icono de la Virgen obsequiado a la Iglesia en 1400 por el Rey aragonés Martín I el Humano, que a su vez le fue regalado por el Rey Luis VI de Francia. Este icono representa a la Virgen con el niño en brazos pintada en lienzo sobre tabla. El icono se guarda en una hornacina de plata plateresca, labrada en Calatayud, del siglo XVI. La capilla se cierra con una verja del siglo XVI, muy similar a la que luce la Iglesia de San Pablo en Zaragoza.


En el exterior se puede admirar el muro magníficamente decorado con un paño de ladrillo resaltado con tracerías  y decoración cerámica vidriada bicolor. La iglesia de Santa María de Tobed fue declarada Monumento Nacional por Decreto del Ministerio de Instrucción Pública y Bellas Artes de 3 de junio de 1931, publicado en la Gaceta de 4 de junio de 1931. 

Por último nos desplazamos a Cervera de la Cañada, donde podemos contemplar su Iglesia-Fortaleza. La iglesia fortificada de la Asunción o de Santa Tecla de Cervera de la Cañada fue declarada Patrimonio Mundial por la UNESCO, lista en la que figura por poseer un estilo único en el mundo, mantener un buen estado de conservación, y por su belleza inigualable.



Se sitúa en lo alto de Cervera de la Cañada, adosada al torreón de un castillo construido con anterioridad, y sigue el tipo de las iglesias- fortaleza del mudéjar aragonés. Su datación y constructor son conocidos gracias a una inscripción tallada en yeso en los pies de la iglesia que informa que fue "obrada y edificada por Mahoma Rami. Con Dios", en 1426. Mahoma Rami fue el alarife, o maestro de obras, predilecto del Papa Benedicto XIII, conocido como el Papa Luna. Mahoma Rami sigue trabajando en Aragón en el segundo cuarto del siglo XV a pesar de la muerte de Benedicto XIII.
Todavía se conservan restos del castillo sobre los que se construyó. Estos restos consisten en un recinto defensivo construido con sillares, reforzado por grandes contrafuertes. En uno de los ángulos se conserva una torre con almenas y en el lado opuesto un cubo, con aspilleras en sus muros y que actualmente aloja la sacristía de la iglesia.

Santa Tecla es una sencilla iglesia de cabecera poligonal de cinco lados que no coincide con el eje de la nave central sino que se alinea al torreón cilíndrico del castillo. Se dispone con una nave central dividida en dos tramos con capillas laterales entre los contrafuertes. En los pies presenta un coro alto sustentado por un alfarje o techumbre plana de madera con decoración pictórica.
Como otras iglesias mudéjares de esta tipología tiene una tribuna abierta a la fachada que recorre el muro Sur por encima de las capillas, incluyendo la torre, donde se prolonga por encima de la sacristía.

En el exterior apenas se advierte decoración, sin embargo al entrar en ella sorprenden los muros, que simulan ser de sillería a base de decoración pictórica a modo de ladrillo, sus bóvedas nervadas decoradas con dragones negros y los grandes rosetones florales gótico tardíos. Decoración del mismo estilo encontramos en los ábsides de la Seo de Zaragoza desde donde se difundirá. Presenta además motivos heráldicos, los escudos de Aragón y el de Cervera de la Cañada, en yeserías, paredes y en el alfarje que sustenta el coro.
Bajo el alfarje del coro se observa un óculo decorado con lazo islámico de siete, hasta el momento, único en el mudéjar  hispánico.

viernes, 28 de octubre de 2016

El mudéjar turolense visto por un sevillano



En determinadas ocasiones me ha referido al rico patrimonio mudéjar de la ciudad de Sevilla y la, a mi juicio, poca importancia que da la ciudad al mismo. Así, por ejemplo, hablamos de las iglesias gótico-mudéjares fernandinas o nos referimos al Centro de Interpretación del Mudéjar del Palacio de losMarqueses de la Algaba. También hemos visitado el mudéjar de Toledo.























Me parecía muy interesante conocer in situ la arquitectura mudéjar española que se supone más importante; la aragonesa, al haber sido incluida en el Patrimonio de la Humanidad (Primero en 1986 la de cuatro inmuebles de la ciudad de Teruel y después en 2001 la aragonesa, ejemplificada en seis inmuebles de la ciudad y provincia de Zaragoza). Esta entrada se refiere a Teruel y más adelante nos referiremos a Zaragoza.

El 28 de noviembre de 1986 la UNESCO incluye la Arquitectura Mudéjar de Teruel en la Lista del Patrimonio Mundial, figurando en ella cuatro de sus monumentos más importantes: la torre, la techumbre y el cimborrio de la Catedral de Santa María de Mediavilla; la torre y la iglesia de San Pedro; la torre de la iglesia del Salvador y la torre de la iglesia de San Martín. 

Bien es sabido , muy resumidamente, que el mudéjar arquitectónico es una arquitectura civil o religiosa para las nuevas autoridades cristianas en el que los constructores, albañiles, etcétera son musulmanes, descendientes de éstos o utilizan técnicas y formas decorativas de inspiración musulmana. Pues los mudéjares aragoneses no tiene reparo alguno en reconocer la influencia andalusí en su obra, tanto decorativa como constructiva. Aun simplificando también, lo más llamativo del mudéjar turolense es es la hermosísima decoración de sus torres (y por supuesto de la techumbre de la Catedral). Haremos un recorrido por estas magníficos monumentos mudéjares.

Para conocer la Catedral de Santa María de Mediavilla seguiremos la web de patrimonio cultural del gobierno de Aragón. Salvo que se indique la contrario, las fotografías son nuestras.
La antigua parroquia de Santa María de Mediavilla fue elevada a Catedral en 1587. Actualmente es el templo más importante de la ciudad de Teruel y uno de los más significativos edificios aragoneses de construcción mudéjar. Conserva elementos tan importantes de este estilo artístico como la torre, el cimborrio y la techumbre declaradas Patrimonio Mundial por la UNESCO en 1987.
 

La Catedral, tras diversas ampliaciones, presenta una planta rectangular de tres naves, con girola y capillas laterales. Las naves laterales se cubren con techumbres planas de doble vigueta y la central con una interesante techumbre realizada en la segunda mitad del siglo XIII. Es una armadura de par y nudillo policromada con pintura gótico lineal, considerada un hito del arte mudéjar.
  
En la cabecera se sitúa un presbiterio heptagonal, antiguo ábside central de la catedral, cubierto por una bóveda nervada. Sobre el crucero se dispone un cimborrio octogonal. A los pies de la iglesia se elevó el coro y se localizan una torre puerta y la entrada a la torre campanario.
(Esta portada es de 1909)












En el exterior se pueden distinguir los materiales usados en su construcción a lo largo de diversas etapas: la piedra sillar se reserva para las esquinas, los muros perimetrales se levantan con mampostería ciclópea, la cabecera y cimborrio se realizan en ladrillo y la torre mudéjar combina piedra, ladrillo y cerámica.

Las obras de la iglesia parroquial de Santa María de Mediavilla se iniciaron en el año 1171, según indican los testimonios documentales y se finalizó con la torre mudéjar situada a los pies en 1257. La torre campanario constituye el último eslabón de esta primera etapa, realizada con lenguaje mudéjar, sirve de modelo tipológico al resto de las torres de la capital turolense.


















En 1537   hizo las trazas del nuevo cimborrio mudéjar Juan Lucas alias Botero, autor, entre otros, de los cimborrios de la Catedral de San Salvador de Zaragoza y de la Catedral de Tarazona. Fue realizado en 1538 bajo la dirección de Martín de Montalbán, que sustituía al anterior medieval y aportaba mayor luminosidad al recién instalado Retablo Mayor de Gabriel Joly. A finales del siglo XVII se construyó la girola recta en torno a la cabecera, desapareciendo los ábsides laterales y se oculta la techumbre de la nave central mediante bóvedas.
Imagen de www.aragonmudejar.com

Fue declarada Monumento histórico-artístico mediante Decreto de 3 de junio de 1931.El 28 de noviembre de 1986 la UNESCO incluye la Arquitectura Mudéjar de Teruel en la Lista del Patrimonio Mundial, figurando en ella cuatro de sus monumentos más importantes: la torre, la techumbre y el cimborrio de la Catedral de Santa María de Mediavilla; la torre y la iglesia de San Pedro; la torre de la iglesia del Salvador y la torre de la iglesia de San Martín


En cuanto a la magnífica techumbre de la Catedral de Santa María de Mediavilla de Teruel es una obra excepcional declarada Patrimonio Mundial en 1986. Se trata de una armadura de par y nudillo, decorada con bellas pinturas que ilustran la sociedad medieval turolense del siglo XIII, crisol de culturas reflejo de la convivencia entre musulmanes, cristianos y judíos. Se caracteriza por la fusión de la estructura y los motivos ornamentales musulmanes con la expresiva decoración figurada gótico-lineal cristiana, dando lugar a una de las mejores obras del arte mudéjar.
Fotografía tomada de web de patrimonio cultural de Aragón
Su construcción se sitúa entre 1270 y 1300, coincidiendo con la ampliación de la antigua fábrica románica de Santa María de Mediavilla para transformarla en una iglesia gótica de mayor envergadura. Al recrecer los muros se necesitaba una estructura ligera y adecuada para la cubrición de la nave central.
La techumbre mide 32 m. de longitud y 7,76 de anchura y está dividida por medio de diez tirantes en nueve secciones. La decoración presenta tanto motivos tallados como pintados al temple en estilo gótico lineal, entre los que se encuentran motivos de la más variada naturaleza: vegetales, geométricos, epigráficos, figurados etc. El programa iconográfico representado en la techumbre ha sido objeto de múltiples interpretaciones.

En la restauración realizada por el Servicio de Regiones Devastadas tras los destrozos causados por la Guerra Civil, sacaron a la luz la armadura, oculta tras bóvedas desde el siglo XVII.
La techumbre mudéjar de la Catedral de Santa María de Mediavilla en Teruel, fue declarada Monumento Nacional mediante Real Orden de 10 de marzo de 1911 del Ministerio de Instrucción Pública y Bellas Artes, publicada en la Gaceta de Madrid de 19 de marzo de 1911.

Fotografía tomada de web de patrimonio cultural de Aragón

















La Guerra Civil española destruyó parte de las bóvedas que ocultaban la techumbre, ocasionando daños en la estructura, incluso se encontraron huellas de disparos. Tras la Guerra Civil se procedió a restaurar la techumbre en varias etapas, desde 1938 hasta 1945, en la que intervinieron restauradores del Museo el Prado, que afectó a la distribución original de las tablas y a su autenticidad. Se inauguró en 1953. En 1987 volvió a restaurarse protegiéndola de humedades y xilófagos. Se descubrieron algunos fragmentos, probablemente olvidados en la anterior intervención. La restauración más reciente, entre 1996 y 1999, devolvió a la techumbre todo su esplendor. 

Nos vamos ahora a la Torre del Salvador también en Teruel. Seguimos documentándonos en la web de Patrimonio Cultural de Aragón.



















Es la torre más tardía del mudéjar turolense y por su singularidad  fue declarada Patrimonio Mundial por la UNESCO en 1986. Su emplazamiento, que unía los portales de Guadalaviar y Zaragoza, pasando por la plaza del Torico, le confiere una identidad histórica que otras torres mudéjares no conservan actualmente.
La Torre de El Salvador es similar, en cuanto a estructura y decoración, a  la de San Martín de Teruel. Está datada entre la segunda y la tercera década del siglo XIV. Se tiene constancia documental de que en 1277 el Obispo de Zaragoza autoriza la recaudación de fondos para la construcción de la iglesia y su campanario. Su cronología más tardía se refleja en las novedades de su estructura ya que se eleva sobre una bóveda de crucería y no de cañón apuntado como las anteriores, y en un mayor desarrollo de la decoración exterior.












Por su estructura y características estéticas se encuadra bajo la tipología de torre alminar almohade, muy característica del mudéjar aragonés. Está formada por dos torres, una envolviendo a la otra y entre ambas discurren las escaleras, de 119 escalones, de acceso al campanario. La interior está formada por estancias abovedadas superpuestas. En la base se localiza el paso de acceso a la calle por medio de una puerta con forma de arco apuntado cubierta con bóveda de crucería. Este elemento refuerza su carácter evolucionado frente a otras torres turolenses como la de San Martín.


















La torre exterior soporta todo el repertorio decorativo de influencia islámica. La parte inferior se decora con frisos de esquinillas y paños de arcos mixtilíneos entrecruzados prolongados en sebqa, y paños de lazaos de cuatro formando estrellas de ocho puntas y cruces, todos de grandes proporciones. En la zona media, entre los vanos, se disponen bandas dobladas en zig-zag. La parte superior destaca por la aplicación de cerámica en tonos verdes y blancos que forman estrellas de ocho puntas. En la parte superior, otro elemento distintivo son los dos cuerpos de vanos con admirables ventanas geminadas. La diferencia que más la caracteriza es la decoración de arcos lobulados entrecruzados. 




La torre fue restaurada entre 1990 y 1993 restaurada por el Gobierno de Aragón. Se consiguio recuperar el esplendor original de la edificación y posibilitar las visitas al interior. El proyecto de restauración es fruto de la declaración de la torre como Patrimonio Mundial por la UNESCO. La Torre de la Iglesia de San Salvador fue declarada Monumento Nacional mediante mediante Orden de 10 de marzo de 1911 del Ministerio de Instrucción Pública y Bellas Artes, publicada en la Gaceta de Madrid el 19 de marzo de 1911. La torre alberga en la actualidad el Centro de Interpretación del Mudéjar.



Nuestro recorrido por la capital turolense nos lleva ahora a la Torre de la Iglesia de San MartínLa Torre de San Martín se edificó entre 1315 y 1316. Está adosada a la iglesia de San Martín, construida en  1706 y que sustituyó a la anterior mudéjar. A los pies de esta torre discurre, la Cuesta de la Andaquilla,. Es ejemplo de la tipología de torre alminar almohade. Siguiendo esta estructura posee dos torres concéntricas, separadas casi un metro, entre las que se desarrollan pasillos y escaleras, que llevan a un campanario, cubiertos por bóveda de ladrillo. De planta cuadrada, da paso a una calle bajo su bóveda de cañón apuntado.












La torre interior está  formada por tres estancias superpuestas, cubiertas por bóveda de crucería y de muros de ladrillo hasta la segunda estancia y en delante de tapial de yeso. El exterior, de ladrillo, aparece decorado con cerámica vidriada en verde y blanco y paños horizontales de distintas alturas. Presenta un gran repertorio decorativo: paños en ladrillo resaltado, lazos formando estrellas de ocho puntas, friso de arcos mixtilíneos y arcos lobulados entrecruzados, bellos apliques cerámicos verdes y blancos, pareja de ventanas abocinadas en arco de medio punto, etc. El motivo decorativo que predomina es el de estrellas de 8 puntas blancas y con orla verde. Estos motivos decorativos derivan de la tradición almohade sevillana. Verticalmente está dividida en fajas, con arquerías, lazos ochavados, ventanales columnillas y el campanario propiamente dicho, en una composición semejante a la del Salvador.












La torre de San Martín ha llegado a nuestros días gracias a diversas intervenciones. Entre 1549 y 1551 tuvo que ser reforzada con un muro de piedra en Talud. La obra fue realizada por el arquitecto francés Pierres Vedel que fue también el autor de acueducto turolense de los arcos. Tras ser declarada  Patrimonio Mundial de la UNESCO, se procedió a su restauración.


















La Torre de San Martín fue declarada Monumento Nacional mediante mediante Orden de 10 de marzo de 1911 del Ministerio de Instrucción Pública y Bellas Artes, publicada en la Gaceta de Madrid el 19 de marzo de 1911. 

Y nuestro último destino se encuentra en la Iglesia y Torre de San Pedro que, además, están vinculados a unos peculiares personajes locales, claro está "Los amantes de Teruel". Situada en la antigua judería, cuenta con una interesante torre campanario y elementos arquitectónicos góticos y mudéjares como el ábside del templo. Por sus características se considera un monumento gótico-mudéjar. Es uno de los grandes templos góticos de Teruel, considerada la hermana pequeña de la Catedral de Santa María. Su construcción se fecha en el siglo XIV, sobre un primitivo templo románico del que se tiene constancia documental en 1196.


La iglesia de San Pedro pertenece tipológicamente al grupo de iglesias-fortaleza, cuya planta, derivada del gótico levantino, se adapta a las necesidades defensivas con la colocación de la tribuna por encima de las capillas laterales, emparentándose con la iglesia parroquial de Montalbán. Presenta por ello una única nave cubierta con bóveda de crucería nervada, sin crucero y con capillas laterales entre los contrafuertes. Estas capillas se abren con ventanales. La luz penetra en la iglesia también por medio de óculos situados en la parte superior.












Al exterior se muestra su ábside de siete lados. Su decoración gótico-mudéjar se compone de frisos de arcos mixtilíneos, cerámica y un remate de ladrillo en alero. La torre sigue las características de la torre de la Catedral, siendo una torre-puerta de planta cuadrada, abierta por arcos en su piso bajo y decorada con arcos de medio punto entrecruzados, vanos abocinados en arco de medio punto y piezas de cerámica vidriada verdes y moradas. Los contrafuertes se decoran con pináculos ochavados góticos y cerámica estrellada.












En su interior conserva importantes bienes como el retablo renacentista del altar mayor de madera tallada, el pequeño altar de los Santos Médicos, obra de Gabriel Joly y la capilla de los amantes, símbolo de la ciudad.












Contigua a la iglesia se encuentra la capilla donde se expone sarcófago de los Amantes Isabel de Segura y Diego Garcés de Marcilla, realizado por el escultor Juan de Ávalos.







































La actual Iglesia de San Pedro data del siglo XIV. Está construida sobre un antiguo templo románico documentado en 1196. Tras la construcción de la torre mudéjar a sus pies en el siglo XIII, se procedió a la reforma de la iglesia en estilo gótico mudéjar entre 1319-1392. El claustro data de 1383. 

La torre es también del siglo XIII y su remate neoclásico es de 1795.


















La Iglesia de San Pedro de Teruel fue declarada Monumento histórico-artístico mediante Decreto de 3 junio de 1931, del Ministerio de Instrucción Pública y Bellas Artes, publicado en la Gaceta de Madrid el 4 de junio de 1931




























Y con San Pedro nos despedimos de la ciudad de Teruel. ¡No dejen de ir a 

conocer esta hermosa ciudad!