miércoles, 20 de enero de 2016

Fray Bartolomé de las Casas, la Inquisición y Sevilla





El sevillano Fray Bartolomé de las Casas llegó a ser Obispo de Chiapas (Méjico) allá por 1543,  A la derecha vemos la estatua que lo acredita como uno de los sevillanos ilustres de la galería del Palacio de San Telmo


Bartolomé de las Casas fue nombrado Obispo en el antiguo Convento de San Pablo de Sevilla, hoy Iglesia de la Magdalena. Asociamos la figura de este dominico con la defensa de los indígenas y se le vincula con los inicios de los Derechos Humanos, el Derecho Internacional...




La vocación indigenista de los Dominicos se ve en las figuras que adornan la cúpula de la Magdalena, del genial Leonardo de Figueroa

Pero al Convento de San Pablo le cabe también el triste honor de ser… la primera sede de la Inquisición en España e igual que a la congregación dominica se mostró tan entusiasta en la labor humanitaria en el Nuevo Mundo en el Viejo y pecaminoso Mundo se dedicó con tesón a perseguir herejes


El símbolo del Santo Oficio, la cruz, flanqueada por una espada y una rama de olivo, se encuentra en la cúpula de la Iglesia en su entrada por la calle san Pablo. En el altar, este impresionante cuadro de Lucas Valdés, que presenta un auto de fe, en el que el mismo rey santo Fernando se afana en acarrear leña para el fuego purificador



                                                                    

¿Quién es el Inquisidor por antonomasia?...Claro, Torquemada, el también dominico Tomás de Torquemada, al que el nombre le viene al pelo






No fue por tanto el Castillo de San Jorge la primera sede de la inquisición, pero sí conviene visitarlo para conocer la geografía de la inquisición sevillana (Convento de San Pablo, Castillo de San Jorge, Plaza de San Francisco…)




     












¿Y dónde se encuentra el monumento a Fray Bartolomé de las Casas en Sevilla?... Pues, en la orilla del río Betis, frente por frente al Castillo de San Jorge...


Ya ven, lo mejor y lo peor de la condición humana. Los que en nombre de la fe denunciaban el genocidio indio en América y los que en nombre de la misma fe e incluso de las mismas reglas de congregación mantenían la pureza de la religión.

El Guadalquivir separa el monumento de Bartolomé de las Casas (en la orilla de Sevilla) del Castillo de San Jorge (en la orilla de Triana). Por cierto, Bartolomé de las Casas era trianero.

Guadalquivir aguas arriba llegaríamos hasta San Isidoro del Campo, en Santiponce donde monjes como Casiodoro de Reina tuvieron que huir por patas para no acabar en la pira...pero eso es ya otra historia (Por cierto, muy recomendable la novela Memoria de cenizas de la periodista sevillana Eva Díaz Pérez)



No hay comentarios:

Publicar un comentario